Israel ordenó el cierre temporal de su embajada en la Argentina por el conflicto en Medio Oriente

En medio del conflicto militar en Oriente Medio, Israel ordenó el cierre temporal de todas sus embajadas, incluida la de Argentina, y solicitó a sus ciudadanos en el exterior reportar su ubicación.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel anunció el cierre temporal de sus embajadas alrededor del mundo, incluyendo la sede diplomática en Argentina, una medida preventiva tomada en el marco del recrudecimiento del conflicto militar en Medio Oriente. La decisión, efectiva desde este 13 de junio de 2025, no responde a una situación específica con Argentina, sino a una determinación a nivel global.

El embajador de Israel en Argentina, Eyal Sela, quien se encuentra actualmente en Israel, abordó la escalada del conflicto con Irán. Afirmó que Irán está «a punto de cumplir su programa de aniquilación», que incluye el desarrollo nuclear con uranio enriquecido al 60% (cerca del umbral del 90% para armas) y la fabricación masiva de misiles, con una producción de 300 misiles balísticos por mes.

El diplomático señaló que Israel decidió actuar para «eliminar esa amenaza» y prevenir repeticiones de ataques como el del 7 de octubre. Sela enfatizó que la ofensiva militar israelí se dirige «exclusivamente contra los objetivos vinculados al programa nuclear militar y las capacidades de Irán para hacer daño a Israel», y sostuvo que Israel «no se está defendiendo solo a sí mismo, está defendiendo a Occidente en general», dada la capacidad de Irán para llevar a cabo atentados terroristas en distintos continentes, como lo sabe bien Argentina.

Este viernes, las fuerzas armadas de Israel lanzaron la «Operación León Naciente», una acción militar dirigida a contrarrestar lo que consideran una «amenaza existencial» iraní, la cual «continuará durante los días que sean necesarios», según declaró el primer ministro Benjamin Netanyahu. Un portavoz militar israelí advirtió que Irán está «más cerca que nunca de obtener un arma nuclear», lo que representa una amenaza para Israel y el resto del mundo.

La situación alcanzó un «punto de máxima tensión» tras la muerte de Hossein Salami, jefe de la Guardia Revolucionaria de Irán, y Mohammad Bagheri, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, durante ataques aéreos israelíes en Teherán. En Argentina, donde reside una de las comunidades judías más grandes del mundo, esta escalada genera preocupación.