Inminente renuncia del titular de la Agencia de Discapacidad tras audios que denuncian el pago de coimas
Diego Spagnuolo, director de la ANDIS, presentará su renuncia luego de que se difundieran grabaciones en las que habla de maniobras irregulares y "pedirle guita a los prestadores". La empresa señalada está vinculada a Martín Menem y la Justicia ya investiga el caso.
Diego Spagnuolo, director de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), presentará su renuncia al cargo luego de que trascendieran audios suyos en los que habla de un presunto esquema de pago de coimas por parte de una empresa vinculada a Martín Menem. Se trata de maniobras irregulares y prácticas de recaudación ilegal en la compra de medicamentos y servicios asociados.
El medio Infobae pudo confirmar que la decisión del funcionario está tomada y que habrá una investigación judicial que estará a cargo del fiscal Franco Picardi.
Las grabaciones fueron difundidas en el programa Data Clave y exponen cómo operadores buscaban dinero a través de empresas proveedoras para facilitarles contratos con el Estado. Los audios, atribuidos a Spagnuolo, describen con precisión un funcionamiento en el que operadores de la agencia solicitaban dinero a empresas proveedoras del Estado, especialmente en el rubro de medicamentos, para acceder a contratos oficiales.
En uno de los registros, el funcionario afirma: «A mí me están defalcando la agencia», aludiendo a la participación directa de un funcionario de la gestión anterior que habría asumido el control financiero del organismo.
El tema apunta a la implicancia de operadores que actuaban fuera del círculo de confianza de Spagnuolo. En los audios, él grafica la operatoria: «Van a pedirle guita a los prestadores», y explica que estos pedidos de dinero a las empresas farmacéuticas funcionaban como un costo extra no regulado, necesario para garantizar la firma de convenios y el acceso a servicios públicos esenciales.
Uno de los actores clave es Droguería Suizo Argentina, una empresa vinculada a Martín Menem con fuerte presencia en el norte. Según el propio Spagnuolo, el mecanismo le permitía a la droguería actuar como intermediaria privilegiada: «La gente de la Suizo llama a los proveedores y les dice ‘escuchame, no llames más el 5, vas a tener que poner el 8 (lo que cobran de medicamentos), lo traés a la Suizo y nosotros lo subimos a Presidencia. Por teléfono. Así se están manejando’».
El entramado, tal como lo describe Spagnuolo, también abarcaba servicios relacionados fuera del área farmacéutica, como internaciones y transporte. «Esto lo hacen de ratas. Es un kiosco de 20/30 mil dólares por mes», agregó, haciendo alusión a las supuestas cifras que se recaudaban por mes. En ese sentido, detalla que la estructura irregular operaba sin su control directo ni intervención, limitándose a, según sus propias palabras, «controlar que lo mío esté ordenado porque el quilombo lo hacen atrás. A mis espaldas. Yo no tengo nada que ver».
Dentro de su testimonio, el titular de la ANDIS afirma haber alertado a las altas autoridades del Gobierno acerca de estas prácticas. «Yo fui y le dije ‘Javier, yo estoy denunciando todo el choreo y abajo tengo gente que va a pedir guita. ¿Qué hago?’», señala Spagnuolo sobre su aproximación a la Casa Rosada.
La crisis se agrava por la constante mención a la logística de provisión de medicamentos. Según lo narrado en los audios, parte de la ganancia de la Droguería Suizo Argentina provenía de seleccionar los medicamentos más rentables, aquellos donde podían aprovechar descuentos y ampliar márgenes comerciales. «Hay una gama enorme de negocios que hay. Hay medicamentos que tiene descuento. Entonces la droguería la consigue más barato y le da una rentabilidad mayor. Hay medicamentos que no tiene descuentos y la rentabilidad es menor. ¿Qué hace la Suizo? Todos los medicamentos que tienen descuentos van para ellos», detalla Spagnuolo.